Siendo la museología critica la ciencia en la que se estudia la relación entre los seres humanos y su medio, además de estudiar en parte los procesos internos de los museos. Se encarga de estudiar a fondo el lugar y el rol que cumplen los museos en la sociedad, y como son influenciados en cierta medida desde la política, la sociedad y la economía. (Navarro)
Dentro del mundo llamado “museo” existen divisiones muy significativas entre los distintos actores que participan tanto activamente como pasiva dentro de este. Estas divisiones han condicionado muchas de las reglas bajo las que se rige el museo. Es así que un museo depende muchísimo del cómo y quién organice los roles, funciones y los procesos que ejecutaran los actores dentro de este.
Los museos son espacios donde entran en juego diferentes intereses y tensiones que se evidencian en la conservación, exposición e interpretación de las obras u objetos que son llevados a una exposición. Es así como dentro de los museos se forjan redes de conocimiento, se otorgan caminos de acceso a conocimiento, se crean códigos, se llega convenciones y sistemas de lenguaje, todas estas como un objetivo que es incidir de alguna manera en nuestra forma de pensar.
Dentro del museo encontramos actores de peso como: el conservador- museólogo, es un personaje que se encarga de la adquisición y conservación de piezas para un público experto. Siendo este el encargado de centralizar los mitos y las memorias que se encuentran en los objetos.
Es así que los actores dentro del museo se dividen en dos, los “expertos” y “noveles”, estos dos grupos solo evidencian la constante pugna entre contenidos y su traducción.
El museo hoy en día se encuentra en una transición para encontrar mayor aceptación entre la llamada la cultura del ocio, es así que dentro de los museos surgen nuevas profesiones museísticas que se vinculan directamente a la accesibilidad de las colecciones, los espacios físico, las exposiciones, programas y recursos, haciendo énfasis en la gestión, el marketing y la búsqueda de patrocinio. Haciendo del museo un espacio de concurrencia frecuente por parte de distintos púbicos.
Debemos tener en cuenta que en este posmodernismo encontramos un predominio de las imágenes visuales sobre la palabra, es así que para que un objeto que trasmite ideas, memorias, mitos, entre otras, son puestas sobre un escenario sorprendente y lúdico para así llegar a cierta clase de púbico.
Tomando en cuenta algunas de las cosas que ya hemos mencionado, el museo es un espacio que está en la trasformación de distintos puntos, entre ellos el cambio de un mando jerárquico a uno horizontal, también podemos apuntar que el museo hoy por hoy podría ser un espacio de experimentación en el que se muestran mensajes y procesos que aparentemente son un reflejo social actual pero no siempre habla de las narrativas que excluye, las voces que no escucha o las políticas que no fomenta.
La cultura de museo entiende a este como un lugar donde se generan dudas, controversias y democracia cultural. Aquí las prácticas que se ejecutan dentro de los museos se desarrollan alrededor de la narrativa, la interpretación y la representación. En la que prima la flexibilidad, la adaptabilidad, colaboración y redes de proyectos. En estos se hace un cruce de roles que demuestra la existencia de un conocimiento compartido y adoptar discursos lternativos.
Rompiendo así la brecha entre “expertos” y “noveles”, es más las exposiciones son de carácter subjetivo, reconociendo la capacidad interpretativa del visitante, que dependerá por supuesto de la organización de la exposición.
La museología formalista, que no es más que la que considera al visitante como un sujeto pasivo. La museología analítica es aquella en donde el visitante es tanto pasivo como activo ya que es el museo quien elige que es lo que debe aprender pero deja que el visitante opte por la mejor opción para aprenderlo.
Y la museología crítica es donde los profesionales y visitantes son productores de conocimiento, rompiendo la línea que los dividía, es así como no solo las culturas mayoritarias sino también las minoritarias tienen acceso ilimitado a este, las prácticas que se han llevado a cabo desde siempre “las tradicionales” son puestas a discusión y entran en negociación. Además hacen una ciudadanía más crítica y menos consumista.
La museología critica no solo cuestiona los contextos de producción del conocimiento sino que deconstruye los procesos adquisitivos, conservadores e interpretadores pero también ha re contextualizado los procesos de los museos. Haciendo del museo una construcción social y cultural. Analiza las formas de coleccionas y de coleccionismo y sus vínculos con el poder.
La museología crítica defiende el conocimiento interdisciplinar, contextual, político, reflexivo y emancipadora.
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